En Argentina no tenemos mucho coco ni la tradición de cocinar nada con esta fruta, pero cada vez son más las recetas que van cruzando la frontera que incluyen el coco en alguna de todas sus versátiles formas.
Hace varios años que uso el aceite de coco como sustituto en muchas de mis comidas y la leche de coco en lugar de la leche de vaca. Para conseguir un balance. Ningún extremo es bueno, pero quedándose sólo con la leche de vaca, se pierden de un mundo hermoso allá afuera.
La leche de coco es una excelente fuente de hierro, potasio y fibra, lo que la hace perfecta para ocupar el lugar de la leche de vaca de vez en cuando. Y tiene, además un sabor denso y frutal que la hace sobresalir en cualquier plato.
Se me ocurrió compartirles esta receta para hacer su propia leche en casa y sustituir la comprada en el supermercado que trae muchísimos conservantes acompañados de un precio ridículamente excesivo, si tenemos en cuenta lo fácil y rápido que es hacerla.
INGREDIENTES
Coco rallado 1 taza
Agua 2 tazas
VAMOS A NECESITAR
Licuadora, procesadora o minipimer
Colador
Muselina o alguna tela tipo gasa
Lo mejor de esta receta es que en Argentina es muy barato y simple conseguir coco rallado. Yo recomiendo usar el que viene sin azúcar agregada, pero si ya tienen en casa el azucarado, va a funcionar perfectamente bien y la leche va a ser un simplemente más dulce.
INDICACIONES
Poner el coco y el agua en remojo en una olla por 20 minutos aproximadamente. Después de este tiempo poner a calentar durante otros 15 minutos a fuego bien bajo, la idea es que nunca llegue a hervir. Verter toda la mezcla en la licuadora y licuar por alrededor de 5 minutos hasta que vean que casi toda el agua está blanca.
Colar la mezcla con el colador cubierto por la muselina y exprimir bien para sacarle todo el líquido posible. La pulpa de coco que les queda es perfectamente reutilizable.
Yo le agrego un huevo, ralladura de medio limón, una cucharada de azúcar y al horno fuerte en forma de cocadas por apróximadamente 15 minutos. Sobredosis de coco, corazón sonriente.
*Consumir la leche dentro de tres o cuatro días y mantenerla refrigerada en la heladera.
*La leche de coco no contiene lactosa, lo que la hace ideal como sustituto para los que sufren de intolerancia.