Muchas veces buscamos respuestas en lugares complicados, cuando las respuestas están en lo simple, en cosas que nos rodean todos los días, en este caso en las rosas.
El agua de rosas, nace nada más y nada menos que de la destilación de los pétalos de rosas con agua y se practica hace miles de años por la cantidad de beneficios que esta simple receta tiene.
Alguno de ellos son:
● Efecto anti inflamatorio: Ayuda a reducir el enrojecimiento de la piel y a tratar afecciones como el acné, dermatitis o úlceras cutáneas. Evita también la formación de bolsas en los ojos.
● Elimina impurezas: Limpia profundamente controlando el exceso de grasa y la suciedad acumulada en los poros.
● Cicatrizante: Sus propiedades antibacterianas, aceleran la sanación de heridas, cortes y a atenuar las cicatrices.
● Mejora la calidad del cabello: Sus componentes nutritivos e hidratantes actúan sobre el cuero cabelludo y la caspa. Por otro lado, nutre el pelo estimulando su crecimiento, evitando su caída y dándole un aspecto mucho más saludable.
● Reafirmante: Su contenido de vitamina B Y E, taninos y pectina, la convierten en un gran tónico que actúa reafirmando la piel.
Si no te animas a prepararla en tu casa, en las farmacias la venden, tiene un muy bajo costo y un precioso perfume que hace muy fácil que la incorpores a tu rutina de belleza y cosmética.
