“No pienso en el arte cuando estoy trabajando. Trato de pensar en la vida”

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Jean-Michel Basquiat (1960-1988), también conocido como SAMO, fue un artista estadounidense de ascendencia haitiana y puertorriqueña. Nuestro artista destacó desde pequeño en las artes y las letras. A los cuatro años ya sabía leer y escribir y a los 11 hablaba perfectamente inglés, francés y español. La crítica coincide que es en las palabras donde reside el pilar de su obra.

Luego de innumerables problemas familiares, el abandono de varios institutos, su padre le acabó echando de la casa. Con 16 años empezó a vivir en las calles y a pintar grafitis. Si bien se suele pensar que la obra de Jean-Michel Basquiat tiene su origen en el grafiti que floreció en Nueva York en los años 70-80, lo cierto es que sus trabajos de entonces no eran grafitis propiamente dichos. Junto con su amigo y compañero de escuela Al Díaz, empiezan a intervenir edificios y muros del Lower Manhattan bajo la firma SAMO, acrónico de Same Old Shit: una estrella había surgido en el underground de Nueva York.

Pasado un tiempo, comienza a usar lienzos como soporte y termina por “matar” a su alter ego SAMO («SAMO is dead»). Empieza a verse influenciado sobre todo por el expresionismo abstracto, Cy Twombly, además del arte primitivo y según él su mayor influencia: el libro de Anatomía de Grey, Basquiat es catalogado como neo-expresionista y «artista afroamericano».

“Desde que tenía diecisiete años que pensé que podría ser una estrella. Pensaba en todos mis héroes, Charlie Parker, Jimi Hendrix… Tenía un sentimiento romántico acerca de cómo estas personas llegaron a ser famosas”.

Pero pronto todas las etiquetas se quedan cortas para definirlo. En 1980 Basquiat empieza a ser muy reconocido en el mundillo artístico neoyorquino. Deja de ser afroamericano para ser americano. Warhol se hace su amigo y protector, y comienza a vender muchos cuadros a muy buen precio. De hecho, su éxito en los siguientes años fue algo rutilante, «The Radian Child», «El niño radiante», empezó a llamarle la crítica. Brillante, con talento, negro, rebelde y sensible: Jean-Michel Basquiat lo tenía todo para convertirse en el niño radiante que brillaría durante la década de los ochenta.

En 1983 Basquiat viajó a la ciudad italiana de Módena, donde asistió a su primera exposición individual. Este publicitado evento supuso un extraordinario éxito, convirtiéndolo en el artista afroamericano más respetado del momento. Pero este éxito tuvo también su lado negativo: Basquiat comenzó a abusar sobremanera de las drogas, lo que a menudo lo transportaba a terribles estados de paranoia.

Cuando se habla de Jean-Michel Basquiat, se está hablando de creatividad, de irreverencia, de sorpresa. Fue un símbolo del Street Art, de la mezcla de culturas y de las nuevas sensibilidades del hombre contemporáneo. Su arte, como su vida, es una mezcla de ternura y brutalidad al mismo tiempo.
Jean-Michel Basquiat murió en Nueva York el 12 de agosto de 1988 a causa de una sobredosis de heroína.

Su amigo, el pintor Julian Schnabel, llevó su vida al cine en la película titulada Basquiat (1996). David Bowie interpretó a Andy Warhol en el filme.
A pesar de su temprano fallecimiento creó más de 1000 cuadros y cerca de 2000 dibujos. Entre sus obras de estilo neoexpresionista cercano al graffiti, destacan Six crimes (1982, Museo de Arte Contemporáneo, Los Ángeles), Untitled (1982, Museo Solomon R. Guggenheim, Nueva York) y Hollywood africans (1983, Museo Whitney de Arte Americano).

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