El fotógrafo argentino nos presenta un shooting en Nueva York, una de sus ciudades favoritas. “Me inspiró el American Ballet Theatre, una Compañía de Ballet que tiene muestras en el Metropolitan Opera House en Lincoln Center, por donde paso muy seguido cuando voy a la Universidad. La idea que siempre se me cruzaba por la cabeza cuando pasaba por ahí, era la imagen del contraste de ver los movimientos naturales de una bailarina en acción en medio de una ciudad como Nueva York donde predomina el Art Deco.
Ese contraste entre el movimiento natural con curvas extremas de una bailarina y los ángulos rectos del estilo de Nueva York me parecía muy interesante. En el caso de la foto de pollera roja, me puse en contacto con una amiga, Bárbara Panontin, que es bailarina/acróbata y cuando le conté la idea le encantó. La verdad no fue nada fácil porque el set fue la calle, entre la gente, los autos y la luz del atardecer que se iba, tuvimos que calcular para poder capturar el momento. Hicimos varias tomas calculando el tiempo del semáforo hasta que después de varios intentos logré el resultado que quería. Después de subir la foto a mi instagram (@villamanu) y ver que tuvo buena repercusión no dudé en mandarla al concurso que salió como ganadora”, nos cuenta en estas páginas.
-¿En qué momento de tu vida te diste cuenta que tu futuro estaba en el arte?
-Desde chico me atraía y me gustaba mucho filmar con una cámara JVC que teníamos. En todos los viajes era el que estaba con la cámara encima todo el tiempo. Llevaba la cámara en un bolsito rojo que me habían regalado, y mis papás me dejaban llevarla todo el tiempo conmigo. Me encantaba. Creo que desde ese momento tengo registro de empezar a descubrir lo que más tarde iba a ser mi futura carrera. En el último año del colegio, comencé a buscar una carrera donde pudiera desarrollar y estudiar lo que me gustaba y se relacione con lo audiovisual. Empecé mis estudios en la facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata, estudiando la carrera de Comunicación Audiovisual. Más adelante obtuve mi título como Productor Integral en Televisión en TEA Imagen, una escuela de Producción de TV en Buenos Aires. Y terminé estudiando en la Universidad Nacional de San Martín, (UNSAM), con el título de Licenciado en Comunicación Audiovisual.
Mientras estudiaba en TEA, al mismo tiempo trabajaba como Segundo Asistente de Dirección para Ariel Evasio, un Director de publicidades y videos clips. Ahí fue donde empecé a familiarizarme con el mundo audiovisual profesional y me dí cuenta que era mi pasión y a lo que quería dedicarme en el futuro. Esos fueron mis primeros contactos en rodajes. De todas maneras, creo que la vocación se va construyendo de a poco. Continuamente sigo descubriendo diferentes aspectos que me gustaría explorar y trabajar. Y sé que mi energía de hoy va ir tomando diferentes formas con el tiempo.
-¿Cómo resumirías tu presente?
-Encontré varias opciones que me gustaban, pero la formación que más me convenció fue la de The New School en Nueva York, una Universidad de vanguardia en medios audiovisuales.
Después de mucho esfuerzo y sacrificio me aceptaron en la Universidad, y luego de dos años, en Diciembre 2016 me gradué con un Master in Media Studies y un Certificate in Management. Al principio fue difícil comenzar a trabajar porque no conocía a nadie. A medida que me movía más en la ciudad, conocía y me relacionaba con más gente. A partir de ahí, con esfuerzo y dedicación, tuve la oportunidad de empezar a meterme en el mundo laboral de Nueva York. Hace ya dos años que trabajo asistiendo en dirección a Michael Abt, un Director miembro del DGA (Director Guilds of America) que trabajo con actores como Edward Norton y Salma Hayek, entre otros. Con él tuve la posibilidad de trabajar en diferentes proyectos para Sony Music y publicidades. Ahora estamos trabajando en la pre- producción de Opera Vida, un documental sobre música indígena del Amazonas Peruano y la metamorfosis en música electrónica de la consciencia. El documental es un viaje que registra los sonidos indígenas y como DJs utilizan estos sonidos para componer música electrónica. Es un recorrido entre el Amazonas Peruano, Berlín, Tulum, Nueva York y el festival Burning Man en California.
-¿Qué lugar ocupa para vos la fotografía?
-Me gusta fotografiar momentos o personas que quiero recordar de cierta manera. Para mí es un lugar de experimentación, mostrar lo que capturo en una foto desde mi forma de verlo, y a medida que voy adquiriendo más habilidad practicando y trabajando con la cámara, poder encontrar mi propio estilo. Me gusta citar una frase del fotógrafo Henry Cartier-Bresson con la que me siento de alguna manera identificado: “Fotografiar es colocar la cabeza, el ojo y el corazón en un mismo eje”
–Además de lo nombrado, ¿Estás con varios proyectos?
-En este momento trabajo en mis proyectos de fotos, videos y hago producciones para diferentes clientes que vayan surgiendo. También trabajo con fundaciones en las que puedo colaborar y que ayuden a mi crecimiento profesional. Mientras estudiaba el Máster in Media en The New School, trabajé en UNICEF en la parte audiovisual en proyectos que fueron proyectados en las Asambleas Generales de las Naciones Unidas. Ahora estoy colaborando en la parte de videos y edición en Noah’s Arc Foundation, la fundación de Joakim Noah, el jugador de los New York Knicks de la NBA. Esta última semana estuve trabajando en “Borderless”, un proyecto experimental del artista Francés/Armenio Melik Ohanian.
El proyecto está basado en “Flats”, escrito por el novelista Americano Rudolph Wurlitzer en 1970. Melik realiza instalaciones de arte utilizando video y fotografía, y ha expuesto en lugares como el Palais de Tokyo y en el Pompidou en Paris. En este proyecto estoy asistiendo al Director de Fotografía. Vinieron con un equipo de producción de Francia y estamos filmando durante una semana en una terraza en Williamsburg en Brooklyn con la vista de Manhattan de fondo. Poder estar en este proyecto es una experiencia increíble por toda la gente que estoy conociendo y la visión diferente que me aporta para poder aplicarlo en mi trabajo. Lo que más me sorprendió del proyecto es como los franceses construyen todo. En vez de alquilar las vías y los dolly para las cámaras, nos pasamos 4 días construyendo las instalaciones. Hice desde asistencia del Director de Fotografía hasta construcción de la instalación.
