Los Carnavales Salteños son marcadamente diferentes de los celebrados en otras regiones del País; reminiscencias ancestrales perduran en él, lo que lo hace diferente. Además la vasta geografía salteña, el escalonado relieve y tradiciones culturales diversas matizan su desarrollo, ofreciendo diferentes estilos y formas de celebrarlo:
En las regiones de los valles y zona sur y andina
Los hitos más importantes dentro de las ceremonias de carnaval en estas regiones son el desentierro y el entierro del diablo de carnaval. Una semana antes al carnaval comienzan a desarrollarse actividades especiales como el Topamiento de Comadre y Compadres, donde los copleros chayas sus cajas, en la Zona Andina y Valles Calchaquíes. Durante la celebración del carnaval grande los participantes acompañan a las comparsas y se congregan en los alrededores de los pueblo para llevar a cabo la ceremonia de “desentierro del Pujllay o desentierro del Carnaval”. El Domingo de Tentación finalizan los festejos con la ceremonia de enterrar al diablo, que volverá a su escondite con hojas de coca, alcohol y cigarrillos para permanecer enterrado durante un año.
Durante los días festivos, los corsos tradicionales, disfrazados caracterizan a esta fiesta, especialmente en el Valle de Lerma: En la ciudades de Salta Capital, Cerrillos y Rosario de Lerma: Los desfiles de Murgas y Caretones; los juegos con nieve marcan su diferencia. Especialmente el desfile de Comparsas, identidad cultural de los corsos de Salta, surgida de reminiscencias aborigen e influencias diversas en los barrios de Salta, que no tienen nada que ver con las propuestas de las comparsas brasileras.
Finalmente el otro componente fundamental de los Carnavales Salteños en esta región son las Carpas Tradicionales; donde se realizan encuentros de bandoneones, bailes de zambas y chacarera y rondas de copleros; mezclado con juegos de destrezas criollas como pechadas y cinchadas de Caballos. Por supuesto el juego de con agua, pintura y harina, en estas carpas son tradicionales.
Región Norte Verde o Norte Yungas
En la Región de Norte, los carnavales poseen matices ancestrales, con la influencia de las etnias de la zona, marcando su diferencia con la celebración del Arete o florecimiento del maíz, donde se destaca una danza alegre, denominada Pim Pim. La celebración del “Arete”, se ofrece por tiempo de cosecha y producción. Es un ritual sagrado equivalente al culto de la Pachamama de las culturas andinas, tiene que ver con el agradecimiento a la “Madre Tierra” por el maíz y la petición por el alimento para el resto del año.
Para la danza del Pim Pim, los bailarines lucen caretas talladas de maderas típicas de la zona, cuya forma tiene directa relación con los animales del lugar con los cuales se identifican. En esta danza, hombres y mujeres forman grandes ruedas y giran en el mismo sentido, los músicos se colocan en el centro de la rueda, luego los bailarines se colocan uno frente al otro, avanzan y retroceden tocándose las palmas de las manos repetidamente al ritmo de la música.
Por su parte en las calles especialmente de Tartagal y Oran, los corsos con desfiles de disfraces y comparsas, dan paso al característico Pim Pim baile ancestral de las comunidades originarias.